Charlamos con Álvaro Lancha, nuevo director de Personas

El pasado lunes se incorporó a la entidad como director del área de Personas, Álvaro Lancha. Un profesional con una dilatada trayectoria en el ámbito de los recursos humanos y en el desarrollo de talento, con casi 25 años de experiencia. Hemos charlado un rato con él para que todos podamos conocerle un poquito más y esto es lo que nos ha contado.

¿Cuál ha sido tu trayectoria profesional?
Empecé mi carrera en Banco Popular hace ya más de 20 años y después de un paso por la red, me trasladaron a Recursos Humanos y es a partir de ese momento cuando empecé mi carrera en el área. Empecé en la regional de Madrid, llevando la parte de recursos humanos para la red comercial. Luego pasé a los Servicios Centrales y coordinaba tres regionales diferentes, País Vasco, Alicante y otra que comprendía las provincias de Almería, Albacete y Murcia.

Después de un año y medio, la entidad creó un banco de banca privada y me nombraron responsable de recursos humanos para diseñar y poner en marcha toda la estructura. Fue un proyecto de 4-5 años, con retos muy ilusionantes.

Con el tiempo, volví al negocio, al área de Internacional, como representante del grupo para instituciones financieras de las zonas de Latino América, Oriente Medio y África y me encargaba de la representación del banco ante los diferentes organismos, de todos los acuerdos con los bancos corresponsables, transacciones internacionales de mayor volumen, sindicados, etc.

Tras esta etapa, me surgió una nueva oportunidad para cambiar de proyecto y me incorporé al equipo de Rabobank, una entidad financiera holandesa de carácter multinacional. En concreto, lideré el equipo de recursos humanos del área de financiación especializada, montando la estructura de recursos humanos en España. Estuve 10 años y lo que en un primer momento fue España, se convirtió también en Portugal, Turquía, incorporamos a otras entidades del grupo a la gestión de recursos humanos e hicimos muchísimas cosas. Supuso llevar a cabo una importante transformación cultural.

Después de esta experiencia, la vida me sorprendió con una nueva oportunidad laboral. Ser responsable de recursos humanos a nivel corporativo y global de una empresa de ingeniería civil, Grupo Typsa, encargándome de la creación de toda la estructura corporativa global, procesos y procedimientos de recursos humanos para todas las áreas de la compañía. En esta empresa he estado mis últimos cinco años, hasta que Globalcaja ha aparecido en mi camino y aquí estoy.

¿De qué logros te sientes más orgulloso?
Todo lo que ha sido la puesta en marcha y creación de estructuras desde cero ha supuesto para mí una gran satisfacción porque ha sido ayudar a crear, cocrear, diseñar… y, sobre todo, dar valor añadido a la función de recursos humanos, no solo hacia la entidad, sino a los propios empleados. Todo lo que ha sido participar en ese tipo de proyectos ha sido muy satisfactorio.

¿Qué supone para ti incorporarte a una entidad como Globalcaja?
Es un reto mayúsculo porque supone volver a los orígenes, al sector financiero, del que tengo muy buenos recuerdos, en un entorno totalmente diferente y con unas condiciones distintas, lo que implica tener que adaptarse a todos los cambios, a las circunstancias que están sobreviniendo y que exigen no parar. También supone continuar la función y la labor que se ha venido haciendo hasta ahora, que no tengo ninguna duda de que ha sido maravillosa, e intentar aportar mi granito de arena para que Globalcaja siga siendo un referente como empresa en la que querer trabajar y desarrollarse profesionalmente.

¿Cómo afrontas este nuevo reto?
Con mucha responsabilidad y mucha ilusión. Siempre hay un momento de vértigo al inicio, hasta que de alguna manera te haces con la realidad de la entidad, con todos los proyectos, la información, los asuntos por resolver… pero con mucha ilusión porque veo que hay unas ganas tremendas de situar a la entidad en un siguiente nivel y además, por lo que me he podido encontrar hasta ahora, con gente extremadamente profesional, que sabe hacer muy bien las cosas y que, lógicamente, hace que el entorno sea muy exigente.

¿Cuáles son para ti los pilares estratégicos sobre los que debe asentarse la dirección de Personas?
Transparencia, cercanía y, sobre todo, compromiso. El cumplir con la palabra dada. Si nos comprometemos con algo hay que tener claro que no podemos fallar. Tenemos que llevar a término aquello con lo que nos comprometemos, porque si no la credibilidad se pierde y tu capacidad de hacer cosas, de influir y de que te perciban como alguien que puede estar echando un mano se ve afectada. 

¿Por dónde vas a empezar a trabajar, cuáles son tus planes y objetivos en el corto plazo?
Primero tengo que conocer bien la estructura, los sistemas, a las personas, lo que se requiere del puesto en cuanto a proyectos de futuro, sin tocar nada que, estando plenamente contrastado, esté funcionando. Una vez realizada esa labor diagnóstica, detectadas áreas de mejora y qué proyectos se pueden poner en marcha que contribuyan a la mejora del ambiente, del clima, de la empleabilidad… proponerlos con mucha ilusión para sacarlos adelante y que nos ayuden a conseguir los objetivos establecidos.

También en línea con el nombramiento de Aurora como responsable de clima laboral y experiencia del empleado, escuchar a los profesionales para conocer sus inquietudes, intereses y ver de qué manera están percibiendo como suya la entidad y en qué forma ellos pueden contribuir también a que Globalcaja se convierta en ese mejor lugar para trabajar en nuestro territorio.

Si tuvieras que describirte con dos palabras, ¿cuáles serían?
Empatía y compromiso.

¿Dónde te gustaría situar a Globalcaja en los próximos meses?
El objetivo ambicioso es que sea el mejor lugar para trabajar en Castilla-La Mancha, lo que sí es cierto es que es un recorrido que lleva su tiempo. Es necesario asentarlo todo bien, evitar asumir riesgos innecesarios y medir muy bien el riesgo y la rentabilidad.
En el corto plazo, debemos dar continuidad a los proyectos que ya están en marcha, consolidarlos, porque estamos en plena transformación y está habiendo muchos cambios, y a partir de ahí, construir todo lo necesario para lograr lo que nos propongamos. Todo ello sin olvidar las ambiciones más de negocio, como incrementar la cuota de mercado y continuar siendo referentes como entidad financiera. Lo que creo es que los recursos humanos siempre tienen que ser facilitadores del negocio, por tanto, el negocio no hay que perderlo de vista y analizar de qué manera los recursos humanos pueden contribuir a ello.

El lado más personal de Álvaro Lancha…

• Edad: 48
• Familia: Casado, con 2 hijos.
• Hobbies: La fotografía, practicar deporte y leer.
• Un libro: ‘Confieso que he vivido’, que son las memorias de Pablo Neruda.
• Una película: Apolo 13. Me gusta mucho el mundo de la antigua carrera espacial.
• Un destino: Menorca, que es donde suelo pasar mis vacaciones.
• Un color: Verde.